No había gansos volando sobre Canada, pero aquella tarde noche de noviembre coincidí con Rocky yendo al Madison, me volvió a contar aquella historia de Marciano, que si Walcott era un gigante de brea, que si era una roca, que si parecía una máquina de picar carne. Yo mientras tanto, veía los trenes espesos de Nueva York como aquella tarde noche en la que Molly Gilmore conoció a Frank y se enamoraron perdidamente como si hoy fuera el día más largo de sus vidas.
Y mientras tanto, la vida se perdía a este lado de la pantalla y Mia Farrow, que no me gusta nada, renunció a pasar al otro lado y los rayos de luz se colaron por las cristaleras de la estación central, la de Guastavino, y el otoño se adormeció en el lago de Central Park, esperando a que el invierno escondiera los patos de Holden Caulfield .
No se puede renunciar a la imaginación, no se puede cerrar la puerta de salida a la angustia y al tedio. Qué fácil era decirle a Naz que no se llevara el taxi de su padre, qué fácil que regresara; pero como negarse al polvo de tu vida, cómo dejar la raya sobre el círculo, ya le sacará luego Turruro de la trena si puede. ¿Por qué comerse un marrón cuando la vida se luce poniendo ante tí un caramelo? decía el poeta Sabina antes de convertirse en cantautor.
Cuantas veces esta semana me he sentido Jack Lemmon tratando de salvar su cincuentena en el Chicago de Glengarry Glenn rose. El metro que pasa a la altura del tercer piso de una casa normal. El tren que atruena un entresuelo lleno de fichas con clientes perdidos.Como me duele ver el cuadro de Sloan a las seis de la tarde, cómo yere la niebla que ya apunta maneras.
Al fin dormir, imaginarme mañana en una noche llena de lunas. No busquéis referencias son solo ensoñaciones.
No debería comentarte y castigarte con mi indiferencia jajaja pooor que para una vez que comentas ¡vaya birria de comentario que me dejaste! Jajaja me lo tomaré como un “estuve aquí” : ) en fin, que escribes taaan bonito que no me resisto, además tengo muchas de las claves de tus ensoñaciones y me has hecho recordar .. Garci, Enamorarse y ese valenciano que llegó a NY con sus bóvedas ignífugas finísimas de ladrillos… serán meras ensoñaciones pero estás muerto de melancolía por todo lo no vivido ( como el barbero de el Crack ; ) o has vivido en tu mente o en letras y bueno.. ¿ sabes qué? como él, en cierto modo tb tú lo has vivido y gracias a ti tb nosotros.
ResponderEliminarAbrazo fuerte! … todo lo del principio es broma.. o no : ) por cierto, ni te imaginas lo que me gustaría a mi disfrutar de la niebla, donde nací, siempre había niebla en otoño. Aquí lleva lloviendo más de un mes, día tras día sin parar.. creo que me está empezando a salir moho en el cerebro : )
jajaja me siento mal si paso por un blog amigo y no dejo nada escrito.
ResponderEliminarpero mal también si solo dejo un comentario lánguido.
Qué bien que hayas entrado en este mar de referencias desbordadas: garci, enamorarse, guastavino...
Te spoileo alguna más porque no creo que este post sea de mayorías: Glenngarry es un peliculón no muy aclamado. Y Sloan un pintor que me encanta. The night of como serie sensacional que ya he comentado y alguna más...
MIl gracias por no ser rencorosa y comentar. Y yo por qué yo te hacia de mi pueblo?
Ves lo que te decía de escribir en prosa... acabo de dar un gran paseo contigo. Besos.
ResponderEliminarCuando lees mucho te haces un recopilador de referencias y de vez en cuando apetece soltarlas en un texto sin complejos de poder ser llamado gafotas, solo porque te da la gana.
EliminarBsssss