Hace unos años -no importa cuántos exactamente-, teniendo poco o ningún dinero en el bolsillo, y nada en particular que me interesara en tierra, pensé que me iría a navegar un poco por ahí, para ver la parte marítima del mundo . Es un modo que tengo de echar fuera la melancolía y también de mejorar mi circulación.
Cada vez que me sorprendo con la cara triste; cada vez que anida en mi alma un noviembre húmedo y lluvioso; cada vez que me encuentro parándome sin querer ante las tiendas de ataúdes; pero especialmente, siempre que la hipocondría me domina de tal modo que necesito fuertes principios morales para no salir deliberadamente a la calle y quitarles uno a uno a manotazos el sombrero a los transeúntes , entonces, entiendo que es justo la hora de hacerme a la mar tan pronto como pueda. Es mi sustitutivo de la pistola y la bala.
Con florilegios filosóficos, Catón se arrojó sobre su espada; yo, sin hacer mucho ruido, me meto en el barco. No hay nada sorprendente en esto. Aunque no lo sepan, casi todos los hombres, en una u otra ocasión, abrigan sentimientos muy parecidos a los míos respecto al océano.
Call me Ishmael. Some years ago - never mind how long precisely - having little or no money in my purse, and nothing particular to interest me on shore, I thought I would sail about a little and see the watery part of the world. It is a way I have of driving off the spleen, and regulating the circulation. Whenever I find myself growing grim about the mouth; whenever it is a damp, drizzly November in my soul; whenever I find myself involuntarily pausing before coffin warehouses, and bringing up the rear of every funeral I meet; and especially whenever my hypos get such an upper hand of me, that it requires a strong moral principle to prevent me from deliberately stepping into the street, and methodically knocking people's hats off - then, I account it high time to get to sea as soon as I can. This is my substitute for pistol and ball. With a philosophical flourish Cato throws himself upon his sword; I quietly take to the ship. There is nothing surprising in this. If they but knew it, almost all men in their degree, some time or other, cherish very nearly the same feelings towards the ocean with me.
Melville.
Desde que era niño, cuando la primavera deja entrever la nariz entre los visillos del invierno, mis sueños se inundan profusamente de mares y playas. Al principio lo achaqué a una asociación infantil con el buen tiempo y los castillos de arena. Cuando la adolescencia me empezó a visitar disfrazada de otoño, creí que el mar estaba unido a mis primeros besos tras las barcas. Después, más adelante, el mar era lo único que me conseguía achicar el cielo de los años juveniles, en los que una agorafobia incipiente y descontrolada me borraba el horizonte. Ahora que a mis cuarenta, necesito calafatear recuerdos con versos, ya estoy seguro de que en algunas de mis anteriores reencarnaciones nací junto al mar, es solo eso, que estoy hecho un poco de mar.
Elchicodelaconsuelo
PS_: se agradecen otras traducciones…Bett, Di, NaN creo que ha llegado el momento de que trabajeis un ratico para mi ¿no?
Yo no lo llamaría siquiera traducción libérrima. Pero está muy bien.
ResponderEliminarQuedan prohibidas la bala y la pistola,los edificios de más de 4 plantas, los mares sin salvavidas y cualquier otra circunstancia que alivie la nostalgia para siempre.
ResponderEliminarCuidese !
Ya queda menos para unas pequeñas vacaciones
Yo no soy depresiva, ni hipocondríaca, ni vissito tiendas de ataúdes...pero vivir sin mar...no me lo imagino.
ResponderEliminar¿Cómo hay que hacer ahora para que se puedan seguir los comentarios?
Mmmm... sé que te debo esta traducción, a ver si embauco a NáN para hacerla a medias. Este párrafo me pone directam la piel de gallina y me da MUCHO respeto ponerme a traducirlo. Ya he dicho muchas veces q es uno de mis libros favoritos de toda la literatura, ahí es nada.
ResponderEliminarYo querría jubilarme frente al mar, solo viendo mar y ninguna construcción. Para darte envidia te diré q en Semama Tonta nos vamos a Dorset, esos acantilados blancos inmensos del sur de INglaterra.
Pq yo tb necesito mar, auqnue seamos de secano.
muxus
di
Catón el Joven era un idiota incurable al que la realidad se le quedaba pequeña. Curiosamente, la realidad es que lleva más de dos mil años muerto y le seguimos recordando.
ResponderEliminarHablas de cosas tristes, de ataudes que no flotarán y a los que no arrastrará la marea, hablas de la vida que, como una sombra al atardecer, se va alargando mientras que poco a poco vamos llenando de huellas el camino que recorremos por la playa.
No sé si el mar es la solución, ahora paso los días junto al mar, levantándome temprano para ver amanecer en su horizonte cada día, y estoy triste, por todas esas cosas que tú y yo sabemos.
Un abrazo
Cada dia estoy más orgulloso de mi blog de minorias...Pedazo de comentarios y pensamientos bien escritos en 4 lineas.
ResponderEliminarBss a tos!
la tristeza es inteligencia
ResponderEliminarUaaaaaaauuuu, te iba a decir que esta vez te habías superado, que el segundo párrafo me había dejado boquiabiertísima, que tenías gran futuro como escritor!!!
ResponderEliminarAsí que me apunto al Melville éste.
¡Qué barbaridad! Aún estoy impresionada! ¡Gracias!
Por alusiones, la traducción es perfecta como está. En este caso no se trata de que sea literal, sino de cómo cada uno interpreta un pasaje.
ResponderEliminarEs como los libros, que a pesar de tener siempre las mismas letras, cada uno entiende en ellos algo diferente.
Y aunque no sean ataúdes, o no sea el mar, siempre se agradece la sensación de tener algún lugar al que huir o donde refugiarnos cuando el resto de nuestra vida, la realidad, nos oprime.
A mi me mola la traducción.
ResponderEliminarY el principio ese de libro te pega.
Hola holita...ya sabeis que es moby dick.El primer parrafo retraducido por un servidor, con vacios lingüísticos pintados de rojo.
ResponderEliminarEste principio te pone al borde del precipicio, en esa añoranza de mar que tenemos la gente de tierra adentro.
Esa necesidad de ver atardecer sentado en las rocas de puertos tranquilos, cuando sin embargo te sientes en el rompeolas de lo cotidiano.
Lo del final es mi resaca de mar que si dios quiere salvaré este finde.
Joaquín doldán, no sé de donde ha llegado, pero debo decirle que me he quedado enganchado a los relatos tangosos o tangueros de su blog.
ResponderEliminarTita. Yo solo me he leido bartleby que es un cuento que puedes encontrar por la red y que a mi me gusto bastante... y ahora estoy con la ballenita...pero tanto Di como el Sr NaN son fanáticos lectores de este buen señor.
Bett me quito el sombrero ante los que jugais profesionalmete al juego de la ruleta rusa que es la traducción.
Vaya, parece que "Moby Dick" es el libro del año, yo estoy en ello. Mi ejemplar es en catalán, y del duro, debo reconocer que me hundo en el mar de la ignorancia cada vez que lo abro y necesito un diccionario al lado para poder ir surcando aguas en el Pequod.
ResponderEliminarEs fascinante y cuando lo termine, estoy convencida, seré distinta y además tendré el carnet de "patrona de barco"...se aprende una barbaridad leyendo, cuánto tiempo pasamos haciendo idioteces y qué poco leemos.
Kisses.