Vivir es huir, los protagonistas de
Datrebil huyen, a veces de sus perseguidores, pero muchas más de su pasado,
siempre hacia sus sueños. El libro debiera llamarse La huida que es el envés de
Libertad. Huimos de la rutina domesticada como hormigas a cambio de migajas, huimos
buscando utopías para olvidar realidades, huimos de las partidas con cartas
marcadas, huimos hacia y contra el sexo abierto en canal que sustituya al cómodo
misionero. Vivir es libertad, pero una libertad condicional, vigilada
férreamente por un juez corrupto que constantemente nos pisa los talones. Vivir
es escaparse.
Datrebil es un libro de
literatura y muerte, de violencia, de traficantes de almas porqué cuando
morimos qué otra cosa queda dentro de nosotros sino los libros leídos, las
palabras no escritas, los versos por publicar. Los personajes de Datrebil,
tienen literatura en su interior, andan por el alfeizar de la vida, con
vértigo, a veces con miedo, andan con el miedo a poner un pie en el vacío, pero
también con la atracción irrefrenable de poderlo hacer.
Siempre huyen, Son personajes
secuestrados que se escapan para follar y por follar. Sexo y muerte; libros y
música, infancia y frustración; adulterio y amor; esperanza y renuncia. Natham
Barr y Bartleby renunciando a escribir. Jan Vravusa tocando al saxo en Cannery
Row, Socrates bebiendo un Don simón y recitando libros de memoria para no
recordar, Puerto Jericó, Knockemstiff, Chinaski y su puta madre. Tokio Blues;
Kafka en la orilla.
Creo sin embargo que a Pedro
Andreu se le escapan las mujeres. Los personajes masculinos están tan profundamente
bien contados que al leerlos piensas con ellos, como ellos; sin embargo las
mujeres siempre están al otro lado del espejo. Como cuando te quedas en
silencio tras follar y te preguntas ¿Qué estará ahora pensando? Personajes
apasionantes como Agus, Jota, Daniela, Tara, hasta Nicoletta esconden más de lo
que muestran. De ellos sabemos todo, de ellas a penas nada. Daniela quiere
huir; Agus quiere huir, Jota y Tara piden a sus captores un rato de libertad
para follar, digo para vivir. Alicia huye por la ventana. Pero me faltan muchos
trozos de sus vidas entre medio, me pregunto demasiadas cosas sobre ellas que
hace que me despiste buscando demasiados porqués.
Andreu escribe siempre poesía
(más aun cuando escribe novela) y a veces lo lírico se apodera de lo narrativo,
pero que más da si está tan cojonudamente bien escrito. Qué difícil me parece
(d)escribir tan bien (también) una secuencia de sexo salvaje sin caer en lo
vulgar y al mismo tiempo tan arrebatadoramente sugerente y excitante. Es cierto
que en muchos casos el libro se dispersa o más bien se desboca; hay páginas en
las que se descompensa porque se nota que el autor se gusta y se encandila en
imágenes sugerentes de las que no puede salir, pero merece la pena.
Hay mucha música y mucha
literatura; mucha metaliteratura. Mucho detective salvaje en busca de autor,
mucha referencia. Los personajes leen y escuchan, los capítulos tienen banda
sonora. Salem y Bolaño; Amy y Nirvana; pero también Auster, Garcia Marquez y
Carver, entreverados con páginas de sucesos y normalidad. Poetas nuevos, cine
negro, series americanas de televisión. Tarantino y Chadler de la mano. Y todo
ello engarzado sin estridencias en la trama vertiginosa de la historia que se
cuenta.
En fin, no sé si Datrebil es un
libro dentro de otro libro, un espejo roto, recortes de prensa, quizás un road
movie, quizás esa pesadilla mezclada con sexo que te hace despertar sudoroso en
una noche de verano, no sé si es una historia de amor o de desamor o un cuento
de miedo; porno gore o poesía de tweet. Solo sé que con sus espirales y su
belleza; su violencia y sus agujeros negros me ha tenido atrapado de principio
a fin y a mi al menos eso me compensa los catorce euros invertidos.
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Me sigue pareciendo increible que ponga una reseña de un libro y el autor se moleste en contestarme. Ya, ya sé que es parte del nuevo juego, pero que quereis que os diga a mi me gusta y me asombra a partes iguales. Todavía soy un carca cibernético.
Puedes leer mi opinión al Secadero de Iguanas del mismo autor en este blog.
También mi opinión a su poesía en el blog de mi primo
Y de paso os leeis los poemas de mi primo que está el hombre envidiosucho!!
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Se me olvidó leer "el secadero de iguanas"...me lo voy a puntar y empiezo por ese que me gusta más el título.
ResponderEliminarDe vez en cuando hay que hacer una apuesta arriesgada, que se salga de la ortodoxia.
ResponderEliminarYa me contarás
Pues me lo apunto. Gracias por las recomendaciones ;)
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