Hace mucho tiempo que no escribia en vacio, sobre la marcha. Que no eludía mi word con su times new roman a 12 y sus tabulados perfectos para pinturrajear un borrador previo. Atropellado por nimiedades intento verme ante el espejo de lo que escribo. ¿Qué otra cosa hacer que verme de lejos?
Hace tiempo que creo que somos esclavos de la historia que nos inventamos, hace tiempo que ratoneamos por nuestro pasado para encontrar argumentos que den sentido a nuestro presente. Y lo más divertido es que no los encontramos.
Cada vez que alguien me intenta explicar cómo es, me doy cuenta de que es justamente lo contrario. Yo es que soy muy ordenado, generalmente es un caos; yo es que me gusta ser meticuloso, pues es un dessastre... Cuánto esfuerzo para explicar con causas lo aleatorio.Cuanto esfuerzo para construirnos un yo presentable en sociedad.
Cada vez que alguien me intenta explicar cómo es, me doy cuenta de que es justamente lo contrario. Yo es que soy muy ordenado, generalmente es un caos; yo es que me gusta ser meticuloso, pues es un dessastre... Cuánto esfuerzo para explicar con causas lo aleatorio.Cuanto esfuerzo para construirnos un yo presentable en sociedad.
Pero en fin, no juzgo y defiendo el derecho de cada uno a inventarse la vida y la biografía que le justifique para hacerle más feliz. Quizá porque empatizo, porque me pongo en su lugar y no me parece tan raro quizá porque lo haga también yo mismo.
Queremos tener una narración logica al cuento que nos contamos y que incluso nos creemos porqué tenemos miedo a ver nuestra vida como un relato absurdo, quizá como este cúmulo de frases improvisadas que os arrojo hoy.
Creo que el orden no es el mejor ejemplo.El que es un desastre suele reconocerlo porque los de su alrededor se lo han dicho mil veces y el maniático también lo asume.Otra cosa es la empatía, la generosidad, el buen hacer, la belleza ...porque los de tu alrededor no te suelen decir la verdad cuando no es todo lo buena que uno quisiera.
ResponderEliminarPero esto es como el tema de los hijos, hay padres que son incapaces de reconocer que su hijo es borde o maleducado o que cojea en algo y luego estamos nosotros.
Que pese a que intentamos dramatizar por aquello de que el romanticismo siempre es más de drama ...se nos ve el plumero.Y tú eres bastante transparente...diría yo.La decoración que uno hace de si mismo , como en una casa, ya dice mucho de uno.
Esta bien eso de que la decoración que intentamos ya define lo que somos. Nos queremos dar un papel en la narracion , el guión del que habla Berne (el psicólogo con B no el de nemo con v) y de otra forma lo decía también Castilla del pino con su concepto de vida errada.
EliminarEs como si al torcerse nuestro personaje tuviéramos la capacidad de reescribir la novela para que retomara nuestro yo sentido. No se pueden cambiar los hechos, solo se puede reordenarlos o cambiarlos de significación. Y ese es un derecho que tenemos que conceder a cualquiera, el derecho a reescribir su porque y su narración de donde está.
Abrazuchos dominicales.
Ponerle lógica al cuento que nos contamos de nuestra vida se hace difícil, porque todo es taaan absurdo...
ResponderEliminarPrecisamente Speedy porque todo es absurdo, nos inventamos historias para mostrarnos ante los demás con una miaja de cordura
Eliminarabrazuchos!
¿Y esa regla de oro del buen conversador?.
ResponderEliminar"Habla mucho de todo, poco de los demás y nada de ti".
Ni en el currículo, vaya....
Bienvenido folloso. Te veo de vez en cuadno por casa molinos
ResponderEliminarNo conocia tan sabia frase!!