lunes, 8 de octubre de 2018

Robando palabras a Lorca y a Camarón.

Recuerdo aquella noche hace años cuando, tras follarnos como animales de madrugada, jugamos desnudos a deconstruirnos los versos de Lorca con ritmo de Camarón. La vida consistía en poner las palabras en otro orden, en poner los sentimientos en verso; en hacer frases como sueños invertidos y en darle a nuestros jadeos argumento:



Qué miedo me da el azul del yelo
parece el filo que corta el tiempo
el grito que despierta el sueño
Qué miedo me da el azul del yelo

qué miedo me da el azul del cielo
qué esconde entre el infinito
las semillas de tu cuerpo
qué miedo me da el azul del cielo

Quien sutura la cicatriz del agua
quien rellena los huecos de tu miedo
quien siembra el campo de anemonas
quien rompe el fanal del duelo

Qué espesura de gemidos al alba
cuando me adentro tras los muros
de tu desaliento
cuando robas el silencio a la noche
qué espesura de gemidos al alba
cuando te deshaces entre mis dedos
flotando como un velero.



5 comentarios:

  1. Pues la vida consistía en posibilidades de lo mas interesantes.

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    1. Hubo tiempos en los que jugar a ser poeta
      era el cigarrillo tras el amor
      otros en cambio, la poesía tomó el papel
      de arma en la guerra.

      Abrazos y bienvenido

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  2. Miedo a la escarcha atrapada en tu cuerpo, miedo al silencio. Nos encontrará la vida, esta madrugada, arropados de palabras

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    1. palabras, muchas palabras
      el silencio
      es el vertigo al pozo de tu abismo.
      Abrazos

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  3. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

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