miércoles, 2 de octubre de 2013

El señor diputado era un hombre locuaz y zalamero.

El señor diputado era un hombre locuaz y zalamero, vestía traje de buen paño, corbata alegre y botines de media caña. De sonrisa fácil y mueca ensayada, engatusaba viejas con la misma sencillez que reclutaba jóvenes para hacerlas del partido. A las unas les prometía residencias con jardín a cargo de la mancomunidad, a las otras la concejalía de deportes y mujer de algún pueblo vecino.
Hoy cuando le he visto en el club de alterne, al pronto ha girado la cabeza como simulando no haberme visto, pero luego con el aplomo de lo inevitable me ha guiñado un ojo cómplice. No sé en que momento se me ha acercado y me ha pedido un gin tonic a su cuenta, (bueno a la del partido), ha despachado a la chica rumana de piernas interminables con la que yo estaba hablando y con una sonrisa torcida y nerviosa me ha recordado que la subvención que teníamos pendiente tenía buena pinta, que no me preocupara que mi sueldo estaba garantizado y que lucharía por él. ¿En este sitio cada vez traen mejores tías no crees? Debí poner mala cara. Pero creedme que es la cara que yo tengo.bordel-spania-afp
Le voy a decir a mi mujer y a su despacho de abogados laboralistas, que te encargue algún informe más, me dijo, porque el que nos hiciste de veintidos páginas por 13000 euros nos pareció breve al tiempo que fantástico, mañana mismo le digo que te llame. Hombre tampoco hace falta que le digas que nos hemos visto aquí, que igual piensa mal, ya me gustaría a mi quedar en una cafetería, pero estos jóvenes consejeros del medio rural se empeñan en venir a este sitio cada vez que duermen en Madrid.
Claro, claro, lo entiendo. (Le debieron sonar irónicas mis palabras) Me hizo una larga cambiada con su chaqueta y se marchó con su inefable guiñó y un !Nos vemos pronto campeón! Os juro que yo no iba a decir nada, mira a mi que me importa si se va de putas o a una exaltación del traje regional. Pero el tipo salió con la mosca detrás de la oreja y con que le iba a ir con la cantinela a su conservadora esposa en el club de golf.
El primer guantazó del morlaco me saltó las gafas, la patada en los guebos me dobló, pero lo que nunca le perdonaré es que aquel gorila me dejara como firma, la bandera regional a modo de babero nacionalista sobre mi jeta de derechas . Pero si yo no iba a contar nada… ahora sinceramente no sé qué hacer.

5 comentarios:

  1. Empezar el día con una buena prosa
    es como el mejor café
    que puedas desayunar,
    un abrazo

    ResponderEliminar
  2. Jaja, fina línea la que separa la política de la mafia, por no decir inexistente.
    Besos

    ResponderEliminar
  3. contarlo, por supuesto, y que se joda!!!

    muy bueno!!!

    ResponderEliminar
  4. No harás nada porque si no no te comprará otro informe.

    ResponderEliminar
  5. 22 páginas 13.000 euros? A quien le mando mi curriculum para ese curro? jajaja

    ResponderEliminar