sábado, 25 de febrero de 2017

El cardiologo, mi mujer y otras cosas de ... Un episodio de lanueradelaconsuelo

Hay cosas que son de primero de matrimonio y si no las tienes claras suspendes y te devuelven a corrales echando leches. No hablo de temas como “ayer vi a mi ex y me saludo muy efusivamente, creo que se ha divorciado”. Tampoco hablo de “ayer tuve que ir con unos clientes al puti pero tranquila que yo me quede en la barra echando unas cervezas hasta que bajaron” estoy hablando de cosas serías de verdad, muy serias como “nunca vayas al cardiologo acompañado de tu mujer” ¿he dicho nunca? Lo correcto sería decir jamás de los jamases.
Ya sabéis adorados lectores que de tanto en tanto caigo en ataques asfixiantes de hipocondría: recordareis aquel momento en el que me notaba desigual y no paré hasta lograr que mi amigo, el doctor F ahuyentara mis fantasmas con un tacto corporal callejero y una comprobación radiologica para la (des)verificación de mi desigualdad.
Pues eso fue una broma comparado con mi dolencia actual y es que de un tipo a esta parte tengo “opresión”, como lo oís opresión total. No, no son taquicardias, ni ventosidades mal canalizadas; no son pinchazos ni arcadas sino la sensación de que ni los pulmones ni el corazón me caben en la caja torácica, como lo leéis, a ver si me consigo explicar, es como si lo que está dentro de las costillas pujara por salirse fuera. Ya sé que es raro, pero desde hace un par de meses siento opresión y yo la siento y ya está. Tengo opresión.
Mis hipocondrias siempre tienen su recorrido. Fase de detección y verificación caracterizada por hacer preguntas indirectas a lo Gila a mi equipo médico habitual. Oye F, si yo te preguntara qué sucede si tienes opresión ¿tu que me dirías? que eres gilipollas y que no te pongas como un cerdo comiendo y se te pasará. Vaya mierda de médico eres tu. La segunda fase es la de masticación y regurgitación de la enfermedad caracterizada por un estado mohino y alicaido. ¿Qué te pasa ahooooora? Nada, nada ya te enteraras en unos meses cuando me lo diagnostiquen. Pero chico estás tonto ¿Qué te pasa?  ¿Has hablado con F? Sí y me ha dicho que no coma, yo creo que me oculta algo. Te habrá dicho que no te pongas como un cerdo de comer, no que no comas. Exacto ¿Cómo lo sabes? ¿Habéis hablado? Seguro que habeis hablado ¿qué te ha dicho que tengo?¿Es grave? Anda quita la ropa del tendedor antes de que llueva y se te quitarán todos los males. Mejor me siento que tengo opresión ¿Qué tienes qué?...Opresión.
Tercero acudir a la consuelo. Mama nadie me hace caso, pero tengo opresión. ¿Qué tienes qué? (la consuelo es tremenda por definición). Madre mia, la hermana de la tia X se sentía rara el mes pasado y anteayer la enterraron. Mamaaaaa que yo no me siento raro, solo tengo opresión. Es que comes una barbaridad, te tendrías que moderar. Hoy comete las judias con oreja y chorizo que te he hecho, pero a partir de mañana dieta. Y llama a tu amigo P, el cardiólogo, y que te haga unas pruebas. Pero el Dr F me ha dicho que no es nada. Qué se sabrá F si no es especialista, tu vete al cardiologo que la vecina del segundo no quería ir y ahora le han tenido que poner un marcapasos. Te echo un para de cazos más de judías ¿verdad?, no se van a quedar en la perola para tirarlas.
Y aquí entra en juego mi variado elenco de amigos médicos. Sostiene Viveiro con maldad que esa es una de las causas de mis hipocondrías que tendrían que quitarme la tarjeta del seguro privado y mandarme a la mierda mis amigos médicos cada vez que les llamo. Pero ellos me quieren y además me valgo de triquiñuelas como invitarlos a cenar para sonsacarles información de mis males. Esta noche he quedado con F y con P para cenar que hace mucho que no los veo. ¿Pero tu te crees que soy tonta? has quedado con ellos por la chorrada de la opresión. Y te vas a poner como un cerdo de comer jabalí y corzo y albóndigas de ciervo y claro luego les dirás que tienes opresión.
Día siguiente: me ha dicho P que si me voy a quedar más tranquilo que me pase por la consulta un día y me hace pruebas de la opresión. Que paciencia tengo que tener contigo ponte a escribir en el blog y deja de mirarte, desde que no escribes creo que estás mas lelo todavía. ¿Pero si antes me decías que el blog era lo que me volvía lelo? Anda sube la compra del coche y no me contestes. Otra vez me noto la opresión me voy a sentar; si sigo así el mes que viene llamo a P, Que te voy a aguantar un mes más no te lo crees ni tu. Ahora mismo le pongo un guasap. Que ya te vale que tenga que llamar yo a tu amigo como si fuera tu madre. Mira, me dice que vayas mañana a las diez cuando termine, lo malo es que no te puedo acompañar porque tengo patinaje. Tranquila que ya voy yo solo y caerá sobre tu conciencia si me da la opresión conduciendo. Pero si llevas dos meses con la opresión que tontada te va a pasar mañana.


Y allí que me marché solico a un hospital de estos de nuevo cuño con arquitectura new age y jóvenes recepcionistas que hacen revivir a los muertos. Me preguntó mi edad, mi domicilio (ya, ya sé que se lo pregunta a todos, pero a mi me hizo ilusión) y todo iba bien hasta que preguntó la causa de mi visita. La opresión señorita, la opresión. Vd es el amigo del Dr verdad? Y dejó escapar una sonrisilla cómplice que yo atribuí a mi seducción y sospecho que ella a la chanza que generan los locos de atar. Espere en la sala que el doctor lleva un poco de retraso.
Esperé un cuarto de ahora. Yo inmiscuido en si me pincharía o no; tacto rectal no creo que me hiciera eso solo se lo hacen a Viveiro para su mancillada próstata. Cuando sutilmente sentí una visita femenina que se sentaba a mi lado. Ya está, la recepcionista que viene a darme conversación, pensé. Cariñó hacia mucho frio y paso del patinaje no me voy a perder el espectáculo. La nuera de la consuelo con su inigualable sonrisa malebola argggg !!
Sale el doctor, besa a mi mujer, pasa, pasa ahora estoy contigo que tengo que salir un segundo. Dentro me esperaba una amable enfermera con rasgos mexicanos y hechuras de la asistenta de la Srta scarlata, es Vd amiguito del doctor, desnudese de la cintura para arriba no mas, mijo. Oiga oiga que soy un hombre felizmente casado, que solo vengo por una leve opresión. Sra puede pasar, no se quede fuera, al doctor no le molesta que entren los familiares y menos ustedes. Enseguida vi que entre las dos nació una inmediata complicidad propia del sexo femenino. Y mientras expresaba mis protestas me di cuenta que la descendiente de Pancho Villa blandía en su mano derecha un juego de electrodos de todos los colores y en la derecha una cuchilla de afeitar con la aquiescencia sonriente de mi esposa. No os voy a mentir que en ese momento sentí una inconfesable simpatía por el indeseable de Donald Trump pero dada la imposibilidad de construir muros entre la chamaquita y un servidor tuve que sucumbir.
Uy cuanto pelito, tendré que rasurarle. ¿Qué tiene que qué? que yo solo vengo por una opresión oigame mija. Dije adoptando su jerigonza buscando en balde su complicidad. Pero adonde va oiga. Que luego me salen los pelos como escarpias y me pego un mes rascandome como los monos del zoo. Si no se agarran loscables no sirve de nada la pruebecita del esfuerso. Siga, siga con lo que me gustaban a mi los hombres sin pelo  y acabar con este gorila, dijo mi mujer. Todavía estas a tiempo guapa. No me tientes.
Que divertidas son sus conversaciones merese la pena haberme quedado para ayudar al doctor. Vaya, ahora la abuelita de Paulina Rubio se cree que esta en una telenovela, será posible. Pongase esta redecilla ñor. ¿redecilla en la cabeza? jajaja noooo en el cuerpo como si fuera una camiseta. Oigame que vengo por una opresión o-pre-sion y para eso no hace falta vestirse de drac queen. Jajaja que grasioso es el sr esto es para que no se muevan los cablesitos cuando corra- ¿correr? ¿A dónde?
En esto entra P, y se une a las risas de la mexicana y de mi mujer que no les cabía un pan en la boca y ya obraba movil en riste dispuesta a inmortalizar el momento Oye tu en qué equipo estás matasanos. Dele la barriguita a la Sra para que le haga una fotito frontal bien echa. Estaba claro se habían conchabado los tres contra mi. Súbete a la cinta que le doy marcha. Aquello empezaba a correr, yo con los cables y vestido como jorge javier en una despedida de soltero, aquello corria más. Los tres partidos de risa. Corría mucho más. Estas bien??? de puta madre no te jode, venga un minuto más.
Bueno ha salido bien. Y la opresión de qué es?? pues ni idea pero del corazón no. Y en esto que mi mujer saca a traición del bolso mis últimos informes médicos del trabajo, anda échales un ojo que tu amigo no te los quería enseñar. Pero tio, tienes el colesterol fatal, claro te pones como un cerdo de comer. Te voy a recetar una pastilla y te la tomas todos los dias.¿pero eso que tiene que ver con la opresión? Nada, la opresión son chorradas tuyas, pero esto del colesterol si que es importante. No se si veiais a Rodríguez de la Fuente y las hienas, pues la sonrisa de victoria de mi mujer se parecía mucho a ellas.
Inmediatamente llamó a mi madre que le detalló todas las personas que se habían muerto el último mes por  el colesterol, llamó a mi suegra, a mi cuñada y le mandó mi foto y creo que contrato una cuña en la radio para anunciarlo porque llevo tres dias dando explicaciones a todo el mundo de mi visita al cardiologo. Si vale, soy un pardillo es de primero de matrimonio no vayas nuca con tu mujer al medico NUNCA ¿pero qué hubierais hecho vosotros si hubierais tenido una opresión?

miércoles, 22 de febrero de 2017

El nuevo invento de blogger: La entrada destacada

Ahora que estoy en una pertinaz sequía creativa que hace que a este blog solo se acerquen hipocondriacos buscando explicaciones a los moluscos contagiosos en aquel famoso post (casi 100 comentarios), ahora que recuerdo con envidia aquellos tiempos de anonimato, felicidad y bloguerío sin sosten; ahora que tan solo me recreo releyendo viejos post aderezados por aquellos/as comentaristas historicos e histrionicos del molinismo preconstitucional ... pues justo antes de tomar decisión de darle cerrojazo al blog acogotado por la puta desidia, el señor blogger ha decidido lanzarme el flotador que salve a este ciberespacio del naufragio total. 

Os lo explico: en lugar de tener que darle al sesamen que azotea mi serrano cuerpo para entreteneros, resulta que ahora puedo rescatar como si fuera una reposición de verano azul los post viejos y pegarlos con una chorradica (llamese gadget) que han sacado con el nombre de "entrada destacada" y que puedes poner en el lateral cual posit en la nevera diciendo que falta nesquik. Así puedo pegar un post viejo de los junimuners, pego otro de la nuera de la consuelo y su milipimmer, otro de viveiro en su etapa juvenil prepodemita y tal y tal que diría sanjesusgil. O sin ir más lejos el afamado de mi excursión campestre que acabo de poner hoy.

Esta muy bien porque así puedes también leer comentarios de blogueros históricos: La doctora anchoa, No, anonima marta, Diva antes de que se la comiera la dtra di, Juanjo en romano, Mara, Anijol hablando de garci, 112 y familia... en fin que te entretienes repasando cosicas viejas y es como ver a Adamo cantando y mis manos en tu cintura en cachitos de cromo y hierro... todo te parece viejuno pero enternecedor a la vez.

No tiene mucha ciencia os meteis en administración en la parte de Diseño y en la lista de gadgets recomendados nada más empezar vereis el de entrada destacada, le cambiais el nombre y poneis algo tierno y evocador como "Yo también tenía un blog divertido antes de escribir post coñazos de libros" y cada semanica ponemos el post viejo que más nos guste.

Ya sé que el juguetico os gustará y alguno/a lo pondreis también en vuestras bitacoras... en fin no me deis las gracias ya sabeis que con mi estilismo y mi inteligencia me podría haber convertido en un influencer, pero el alcohol y el abuso del frenadol me ha llevado al ser patetico que soy.

Besicos a puñaos hermanos.

lunes, 13 de febrero de 2017

El vano ayer de Isaac Rosa Opinión Gracita Morales o las torturas.

Creo que lo que mas le jode a Isaac Rosa es que para mucha gente el franquismo de los años 60 siga siendo Gracita Morales, las narraciones impostadas del No-Do y las victorias “amañadas” del Madrid. Un franquismo campechano y costumbrista; seiscientos, periquito y suegra; una tele, la nuestra, con dos canales y una mentalidad; el domingo a misa, el sabado casquete y luego la querida con un pisito en zona residencial.

“El vano ayer” es un libro que me ha gustado. Ganó el Romulo Gallegos que es uno de los pocos premios en los que confío. Este premio venezolano tiene en la actualidad la rémora que tiene todo lo bolivariano, es decir, que se entiende embadurnado de política de chandal. Y ciertamente es un libro militante, pero no por ello malo. Estaría en la linea de Gopegui, a mi modo de ver mejor que ella, es decir de hacer política desde la descripción de lo cotidiano.

Entonces, si decimos que el libro va sobre el tardofranquismo y que el escritor es indisimuladamente militante, (de hecho escribe en el diario.es) los que habitamos más a la diestra que a la siniestra deberíamos de ponerle el RIP en la página tres sin ir más lejos, pero no es así. Es un buen libro.

El libro va de metaliteratura. No se horripilen, ya saben mi animadversión hacia Vila-matas y el bolañismo campante. Es metaliteratura pero no empalagosa ni intensa. El autor nos habla del proceso creativo de la propia novela, de cómo se va gestando la viviencia de dos personajes que sirven de conductores (o de excusa) para lo que nos quiere contar.

Empieza en la anécdota, porque quizá sobre ello también vaya la novela. ¿Recordais la broma de Kundera? (si no la habéis leído ya tardáis) pues Rosa nos mete en un acontecimiento superfluo como una carga policial, una revuelta estudiantil y los datos difusos de dos personajes un profesor y un alumno que se encuentran quien sabe si por azar allí. A partir de este hecho el escritor, que nos habla con voz cruzada de autor y personaje, empieza a investigar, a suponer, o quizás a inventarse la vida de los dos.

En un principio se nos podría venir a la cabeza el salamino Cercas, pero a nada que seguís leyendo os dais cuenta de que no tiene nada que ver. Aquí se toma partido, no es un narrador-investigador neutro. Y como decía al principio, el autor tiene el objetivo claro de hacernos cambiar nuestra forma de ver el franquismo setentero como una comedieta de cine de barrio. Nos muestra torturas y disidencia; tristeza y crueldad, vidas privadas y vidas perdidas  en el régimen o precisamente por el regimen.

Juega con voces distintas, a veces narra, a veces traslada notas de prensa, a veces entrevista a personajes, a veces diatriba con descaro. Se encasquilla en varios capítulos, (la gracia es que el mismo lo reconoce y lo pone). En otros puntos se empalaga, en algunos pierde la pinza totalmente… pero siempre dejando ver los rasgos de una novela trabajada y no como pudiera parecer falsamente una novela de impulso. Todo tiene lógica, todo encaja al final y acierta en un final cerrado perfectamente bajo la apariencia de un final abierto.

El autor quiere desarmar la imagen del franquismo Light de los últimos años, en esa idea, ahora de muchos, de hacer ver que la transición no es el trasunto desde una dictablanda a la democracia, sino la legitimación de unas elites franquistas dirigentes que se inventan la transición para consolidarse y dar el relevo a sus hijos (algún día hablaremos de Bourdieu).
Yo discrepo. Quizá la explicación esté en la poco compartida diferencia entre régimen totalitario y autoritario que expone con la maestría que le caracterizaba el profesor Ramírez (España 1939-1975. régimen político e ideología) pero eso son digresiones que nos desviarían del objetivo que nos convoca hoy que es la apostilla de un buen libro: El vano ayer de Isaac Rosa.

martes, 7 de febrero de 2017

El Plan El teatro que me gusta

En esta vida en diferido que vivimos los de provincias, las cosas interesantes siempre llegan un año después. Además en esta tierra gusanera preferimos que primero nos lo cuenten no vaya a ser que luego no nos guste y hayamos “perdido el tiempo”. Es por eso que estamos esperando a que publiquen una necrológica, perdón digo una critica objetiva, de las que nos habitúan en el Heraldo, para tomar la decisión. Y como las obras de teatro solo están tres días a lo que te enteras ya no está.
Y si no hay crítica pues no hay obra. Y si no hay personaje de los de la tele, no hay contraportada dominical y nadie se entera y joder que pocas obras vienen a Zaragoza que todas se quedan en Madrid y además cómo las pueden poner en el Teatro del Mercado con lo bonito que es ir a lucir pieles y echar el paseillo por el Principal.“Mira Pilarín a mi me encanta el teatro, que yo nunca me pierdo la de Vaya par de gemelos con Arevalo y Bertín”. pues eso, pues vale. 
Y me imagino a los encargados de programar jugándose sus cuartos y diciendo eso de: si quieren bertín pues mucho rato porque no están las cosas como para muchos riesgos. (y no es coña, lo digo con todo el respeto del mundo por Arevalo y Bertín que se lo ganan).
Luego no nos olvidemos que aquí todos  somos mu listos y además como nos aburrimos, pues nos entretenemos pegándonos hostias los unos a los otros: de un lado tenemos a los unos, a los  "progresistas de boina", que si no se marcan una rareza parece que no sea teatro y que si encima no te gustan sus ocurrencias, te tildan de facha y carca;  y despues tenemos a los otros, a "los estudiaos casposos": "que sí Paco, que te lo digo yo, que en el teatro solo hacen melonadas , que donde esté una obra de calderón de la manca de toda la vida que se quiten todas estas payasadas de los titiriteros de la ceja, que no es que solo lo diga yo que lo ha dicho hasta Javier Marias en el Pais ese que escribió lo de Alatriste. Donde esté un clásico que se quite lo demás porque estos rojeras del ayuntamiento no quieren más que joder lo tradicional con sus mamarrachadas." y tan anchos que se quedan.

En fin…
¿Cual es entonces el teatro que me gusta? pues probablemente el que me cuenta cosas que me interesan. Me gusto Juan Diego Botto con Un trozo invisible de este mundo; me gustó Sacristán en Almacenados y me ha parecido una obra magnifica El plan de Ignasi Vidal que vi el domingo casi de casualidad.
La obra tiene velocidad desde el primer minuto, un vocabulario que nos suena de cada dia, las frases no se quedan sueltas sino que dan pie al siguiente actor que las coge al vuelo y las engarza en una nueva; diálogos no peroratas, pronunciación no declamación; y entre broma y broma se va configurando una cubierta de risas sobre el mundillo de lo serio. Un peculiar encaje de bolillos de las vidas y las frustraciones de unos tipos normales, perdedores, cuarentones y la sensación de que algo está pasando que no sabemos. Y esa inquietud nos pega a la obra. Ese querer saber cual es El plan, por qué han quedado esa mañana.
El director construye personajes diferenciados, cada uno con su acento marcado. Que no sé si es el de ellos propio o se ha buscado así queriendo, pero que no desentona, gusta y pega. Y quizá el trasfondo de que en ese momento de la vida en el que las cosas deberían pasar a ser tranquilas es precisamente cuando se encabronan con esta mierda de crisis y nos vuelve a poner en la casilla de salida. Como cuando jugábamos a la oca y después de pasar medio tablero caías en la calavera y te hacía volver a empezar. Y descubrimos que a cada uno le pasa algo que le va hacer replantearse su futuro para no colapsar.
Javier Navares, Chema del Barco y Manuel Baqueiro lo bordan. La obra escrita y dirigida por Ignasi Vidal es un subrayado de critica e ironia...me la comprare en papel como hago con las obras que me gustan. 
Y bueno,si no encontráis a nadie que os acompañe decidle a vuestra suegra que Baqueiro es de los tiempos revueltos de la tele, que eso no falla.
Genial Obra id a verla y que rumie Marias.