Si os dijera que 2666 de Bolaño
es una mierda de libro primero os mentiría y segundo sonaría a rabieta de
lector radical, crítico sin matices. Tampoco voy a seguir por la milonga de si
es un libro gordo, flaco o metrosexual, eso son estrategias comerciales de la
editorial que nada tienen que ver con la calidad: podrían haberlo sacado en
cinco libros, andarse con memeces de trilogías o, como han hecho, editarlo en
formato de cuña para calzar el coche cuando cambias la rueda. Ni lo uno, ni lo
otro ni quita ni aporta nada a la novela.
El señor escritor se ha muerto,
pues sinceramente lo siento, pero tampoco vamos a subirlo a los altares por culpa
de haberlo ignorado en vida. Fue un libro póstumo pues que hubiera empezado
antes. Dicen que inacabado, pues a mi me recuerda a los partidos del Zaragoza
que aunque duraran tres días más no aportarían ni una pizca más de diversión,
pues eso: lo que hay hay y lo que está está.
Poco a poco durante cinco libros;
armando el todo con las sombras de las partes; intuyendo más que viendo;
haciendo una carta con los restos de cada banquete, se nos va dibujando Santa Teresa
ciudad que se convierte en la verdadera protagonista de la historia. Todo acaba
allí, todo empieza allí, aunque sea por caminos procelosos de principio de siglo,
aunque sea de visita, aunque para ello tenga que empalar un militar rumano a una
heredera rubia de la aristocracia centroeuropea con su polla desmedida bajo las
catacumbas de Drácula. Todo acaba allí, en México.
¿Y si el tema fuera la violencia?
¿Y si Hitler, el boxeo, la guerra mundial, las envidias académicas y los
asesinatos machistas no fueran sino la misma cosa? ¿el sexo violento, violentado
las más de las veces, por varios orificios para más detalles, silencioso a
veces, frenopático las otras, social en su mayoría, ligado al pozo oscuro en
donde a dios y a sus santos se les rompen los miembros y se les defeca en su
cara?
Reconozco que me gustan las
secundarias del libro incluso a ratos me ponen un poco: la abogada de Klaus, la
directora del psiquiátrico, la profesora Liz Norton y sus ganas de leer y
follar, Ingeborg y la baronesa Von Zumpe. Todas ellas en la frontera difusa de
la locura y la cordura; del hedonismo y el pensar. Esa frontera que marca los
confines de los sueños y los deseos: el telón entre Rusia y Rumania; entre Sonora
y Arizona, entre las pesadillas y el obituario de un diario de ciudad.
Cada muerta tiene un nombre, cada
polvo un recuerdo, cada página doblada una mención a la literatura en todas sus
formas, en todos sus roles: el lector, el estudioso, el escritor, el editor, el
protagonista. Y una historia de la lucha social y la pobreza. Las maquiladoras,
los niños hambrientos de postguerra, las colonias humildes en los extramuros de
la ciudad podrida por la corrupción y el silencio consciente. La policía que un
día se juega la vida, otro es cómplice de la mafia, el tercero se reúne en un
bar para contar chistes machistas que enrojecen en medio de huesos hioides
machacados y anos de adolescentes reventados en un análisis forense contado con
toda crueldad.
No entendía el título hasta que leí
al maestro NaN en un comentario en el blog de Di. Es el segundo tiempo del
diablo 666 . La parte oscura y tenebrosa del siglo XX a través de muchas
de sus fosas sépticas donde rezuma la mierda, la violencia y la falsa moral.
Si me preguntáis si me ha gustado
os contestaré que no mucho, si me preguntáis si hay que leerla os contestaré
que sí. Hay libros que hay que leer porque hay que opinarlos si eres de los que
te gusta opinar. Para mi es un libro pesado, poco divertido, voluntariamente
difuso, sobrecargado. Las partes prescindibles no compensan las de buena
literatura que las hay; pero sin embargo huele a libro que se regurgita, que
regresa; personajes de esos que van reviviendo con otras lecturas. Sus
referencias constantes al mundo de Santa Teresa serán necesariamente uno de esos
Macondos imprescindibles que dibujan el continente literario latinoamericano. Tened
cuidado con empezarlo porque acabarlo se termina convirtiendo casi en una
obsesión.
Tienes toda la razón. Lo de menos es el formato. Y eso de los libros póstumos...yo los pondría en cuarentena.
ResponderEliminarLo que no se puede negar de tu post es que está lleno de tu gracia escritural; he disfrutado muchísimo leyéndote.
De nada.
Besos.
Muchas gracias Marian.
EliminarEn mi modesta opinión a este librico se le ha envuelto en demasiada mitología. Que si el escritor de minorias, que si la primera obra monumental del siglo XXI...
Es cierto que Bolaño me satura en general,por lo que no soy objetivo, pero eso es problema mio. Pero es que este libro es excesivo todo él.
Es como estar viendo un mapa y agrandar en la pantalla cada pueblo para detenerse en ver el detalle de la calle de cada pueblo. ¿Qué sucede? pues que te pierdes y pierdes la globalidad del recorrrido. Pues eso pasa en el bolañismo, pero qué le vamos a hacer esa es para muchos es la virtud de este escritor.
Bueno besicos. A ver si me pongo al dia de tu blog que llevo un mes de retraso.
Bueno, podría haber sido peor... venía a leerte con cierto temor. Me queso con una cosa q resaltas, q fue para mí el momento del libro: las bromas de los policías. Sin ánimo de secuestrar el blog, si no te importa voy a pegar aquí un párrafo de mi divague, para quien no lo haya leído entienda la bestialidad de lo q hablamos:
ResponderEliminar"Cuando llevas decenas-cientos!- de páginas de asesinatos terribles contra mujeres que no le importan un pepino a nadie, mujeres pobres que han dejado a su familia para ir a ser explotadas laboralmente en una fábrica yanki, mujeres a las que nadie que puede hacerlo se molesta en proteger, entonces Bolaño te hace asistir a una quedada de policías en un bar. Y uno de ellos se arranca y se dedica a contar "chistes de mujeres". Chistes tipo "en cuántas partes se divide el cerebro de una mujer? Pues depende de lo duro que le pegues", o "qué hace una mujer fuera de la cocina? esperar que se seque el suelo", o "cuánto tarda una mujer en morirse tras un disparo en la cabeza? 8 horas, lo que le cuesta a la bala encontrar el cerebro", o "por qué tienen las mujeres una neurona más que los perros? pues para cuando estén limpiando el váter no se beban el agua", o "en qué se parece una mujer a una pelota de squash? en que cuanto más fuerte le pegas, más rápido vuelve". Se pilla el nivel?
Estas bromas duran tres páginas, y su lectura se me hace más dura que todo lo anterior. Es furia lo que siento, y aquí es cuando se me abren los ojos. La sangre, las vísceras, las unias y los dientes de todas las mujeres asesinadas tienen por fin una explicación. No hace falta, como en una vulgar película de misterio yanki, que nos desvelen la cara del sicópata que va matando por su cuenta. Aquí está claro quien mata, y son todos. Como decía antes, mis dudas sobre los límites del humor me visitan de nuevo y me confirmo en que cada uno elige las bromas que hace, los chistes que cuenta, y que ellos te definen, hablan de ti, en lugar de la mujer, el negro, el minusválido, el pobre del que te intentas reír, a costa del que quieres brillar, con tu chiste. Que haga un policía estos chistes, y sus companieros se los rían (sin romperle la cara, que es lo que a mí me llama) ilustra el estado de una sociedad. Explica la misoginia, y lo nada que importan las mujeres. Cuando termino esta parte de los chistes, se me ha ido acumulando una ira de proporciones descomunales. Bolanio ha escrito un libro profundamente feminista, y no un ensayo académico, sino que te lo hace sentir. Rabia y desesperación, pero no la usual, intelectualizándolo; esta está en tus tripas".
Besos
di
Hooooooooooooola Dtra,
ResponderEliminarsinceramente cuando empecé pensaba que nunca lo podría acabar.
No sería justo decir que este hombre escribía mal, pero tampoco le veo la pasión con que los defendeis su club de fans.
1.-Esperé a leer tu post después de haber escrito el mio para no verme influenciado. Pero luego descubrí que coincidiamos en muchas interpretaciones y cosas en comun. Por ejemplo las páginas de los chistes después de toda la serie de descrripciones truculentas.
2.-Es un libro muy feminista. Todo el elenco de descripciones de los personajes femeninos a lso que aludia en el post es de por sí un alegato. Sin ya entrar en el tema de los asesinatos machistas.
Por cierto el personaje de la siquiatra, su relación con el poli y sus ganas de largarse me pareció sensacional .
3.-Yo haría un cuadrante sobre qué parte del libro nos ha gustado más a cada uno y cual menos. Mi favorita es la de las muertes y la menos la de analfitano que me sobra de cabo a rabo.
4-.Coincido contigo en que la parte de la guerra se le enreda en las manos y hace dormir al lector. (Salvo el polvete de la duquesa claro jejeje)
5-.Espero ansioso las aportaciones de NaN.
Besicos (aasea little kisses)
Pocas cosicas, puedo decir. No es un libro póstumo que se "montó" sin su consentimiento. Estaba prácticamente terminado y montado, pero faltaban cosas que tenía en su ordenador pero no habían sido trasladadas al cuerpo final. La viuda encargó al crítico y amigo íntimo del escritor, Ignacio Echevarría, que jugara con su ordenador, las rescatara e introdujera en las partes a las que correspondían.
ResponderEliminarBolaño sabía que se estaba muriendo y quería que esa su obra magna, la que podría dar de comer durante a ños a sus pequeños hijos. Era una jugada de ajedrez muy bien pensada.
Por supuesto, niego lo que dices de él. Para mí fue un libro que me atrapó, que me tuvo en un sentimiento de euforia desde la primera página. Cada uno busca cosas distintas en los libros, yo busco la "magistralidad", que tan pocas veces se da. Yo gocé hasta el final de la magistralidad de las historias y de cómo se cruzaban. Eso no significa que tú seas peor lector, sino que yo busco otra cosa para hablar de excelencia.
Ya toi aqui!!
EliminarA ver ya sé lo de la edicion programada por el autor tras su muerte, simplemente y en eso estarás de acuerdo se le ha envuelto de una mística cuasi sagrada al libro en concreto y al bolañismo en general que me parece un poco excesiva.
Construye un mundo propio y eso está bien pero el trenzado le sale un poco despeinado. Ojo que igual es lo que quería hacer pero ese constante zoom y separación es un poco agotador.
No obstante reconozco el valor de acometer estas historias y sin duda el dominio del lenguaje, pero seguirlo es un ejercicio de constinua paciencia.
Abrazos.
Y ya que terminé hablando de excelencia, ¡vaya casualidad la que me ha pasado! Soy un seguidor fanático de Emiliano Monge. El viernes estuve con él. No tenía el pobre otro remedio, era el “Librero por un Dia” en Tipos Infames, montando una mesita con sus favoritos y no tenía más remedio que aceptar mi presencia. Y mi cháchara. Había comprado ya su libro y se lo di a firmar.
ResponderEliminarEsta tarde, tras una breve siesta, me he leído sin pestañear las primeras cien páginas y me ha vuelto a pasar lo que me sucedió leyendo ese libro de Bolaño: una sensación de que se me ha abierto una puerta a un mundo que merece ser conocido. En varias ocasiones, de ser yo una señorita de buena familia, habría llorado en ocasiones por la forma en que construye las frases y el esfuerzo que pide al lector para saber quién está hablando y de qué. Pero como no lo soy, me he limitado a tener escalofríos puntuales en los brazos.
¿Recomiendo este libro? Sería lo último que hiciera. ¿Pienso traspasar mi descubrimiento a otros? Solo a 5 personas, cuyos nombres ya sé.
He sacado de Internet un par de párrafos que explican de qué va y te los copio aquí abajo.
Por muchos años, Emiliano Monge tuvo miedo de escribir este libro. Temía que resultara en una autoficción banal. También le aterraba indagar en el pasado de su familia. Sin embargo, cuando llegó el momento de hacerlo, actuó como un depredador: “Después de acechar a su presa, el tiburón cierra los ojos antes de atacar y no ve lo que muerde. Así me sentí yo con No contar todo”.
Fue un trabajo en el que pensó desde el inicio de su carrera, pero que no se sintió capaz de lograr hasta después de haber publicado otros libros. Quería narrar la historia de los hombres de la familia Monge con el hilo conductor del abandono: su abuelo que fingió su muerte, su padre que abandonó todo para ser guerrillero y él mismo que nació enfermo. “Decidí que tenían que ser tres voces distintas. No quería que fuera una novela autorreferencial donde el yo es el centro. De hecho, quería estar lo menos presente. Así que escogí una persona gramatical para cada personaje según la distancia emocional que tuviera conmigo: el abuelo en primera persona, el padre en segunda persona y yo en tercera persona”, cuenta.
Ya sabes que a alguien como tu que me descubrió a Montero Glez le hago caso siempre a pesar de nuestras discrepancias bolañistas y de Vilamatas.
EliminarEntonces de monge empiezo por Las tierras arrasadas, No contar todo o Moririse de memoria????
Por cierto estoy ahora con Sangre callada del maestro glez. Ya te contaré.
Tierras arrasadas
Eliminar¿Te imaginas lo que debía ser leer el Ulises de Joyce en los primeros años de su publicación? Casi imposible, pero abrió caminos al modo de contar y ahora lo puede leer casi cualquiera. De hecho, lo leemos, sin saberlo, en multitud de libros sin complicaciones.
ResponderEliminar¡Vamos a la tarea mexicana! Te propongo que empieces a leer a Monge con "Las tierras arrasadas". O incluso, aunque escribe cada capítulo sin ningún punto y aparte, a Fernanda Melchor, "Temporada de huracanes".
La literatura mexicana está formando parte de la gran literatura.
Luego te contesto a los otros comentarios del libro. Pero si no se me olvida. Al hilo de los mexicanos. ¿has leido sin noticias del imperio de fernando paso? Es el proximo gordote q tengo a la espera.De la lista de las 100 mejores novelas en español del ultimo tercio del siglo xx.
EliminarDe los q dices no he leido ninguno. Ni sabia de su existencia. Me los apunto.
Abrazos. Espero q todo te vaya bien.
Aunque me lo propongas dos veces, solo prometo comprarme un ejemplar y leerlo este verano. Por cierto, he decidido releer la novela de Bolaño.
ResponderEliminarY a cambio, te ruego casi de rodillas que leas "La universiad desconocida", el último libro de poemas de Bolaño. Un tocho que enlaza con relatos suyos y permite conocerlo bien.
jajajaja es que cuando comento desde el movil no se porqué pero me duplico.
EliminarTus deseos son ordenes para mi ya me he conseguido la poesía completa de Bolaño y tras una primera ojeada me ha dado muy buena impresión.
Mi empeño con Fernando paso es esta lista que ya he comentado alguna vez que pretendo completar antes de mi jubilación cuando por fín me leeré a Vila matas
https://novelashispanas.wordpress.com/las-mejores-100-novelas-de-la-lengua-espanola-de-los-ultimos-25-anos/
No pienso...ni por asomo.
ResponderEliminarCon "los detectives salvajes" y una entrevista que vi en México tuve sufieciente.
Bueno hay paises que hay que visitar aunque sepas que no te van a gustar del todo.
ResponderEliminarYo los detectives lo dejé a medias.
Bss
"No sería justo decir que este hombre escribía mal"... jajajaja. Vale, bien, sigo.
ResponderEliminarDe las historias sexuales de psiquiatras en la ficción me quedo sin duda con la q se tira a Dicaprio en "The Departed"... mare mía, yo aquel día descubrí a Leo, q lo tenía por un rubito sin interés...
Y ya tal
di